Nuestras estadísticas internas muestran que en más de un 50% de los casos no se cubren los objetivos buscados en la transacción y en un 20% la operación ha sido un desastre. Entonces, ¿Por qué cada vez se hacen más operaciones de M&A?

Nuestra opinión es que, el líder tiene un desconocido sesgo psicológico, en positivo o en negativo por hacer la operación. Hay quien es demasiado prudente y hay quien es demasiado optimista.

En este sentido, nuestra recomendación es que cuando el vendedor reciba una aproximación de un interesado o, por su parte, el comprador unos quince días antes de formalizar la transacción… paren la pelota y reflexionen un poco. Aunque parezca absurdo no siempre se reflexiona.

Primero debe de identificarse fríamente la decisión que se necesita tomar: el potencial vendedor debe recapacitar si puede continuar realmente competiendo o hay un proceso de consolidación en marcha, si el equipo directivo esta alineado con él… el comprador si el riesgo que asume es asumible, si realmente va a poder integrar a la compañía, si no hay otra manera de lograr el mismo objetivo…

Después, ser consciente de las emociones que tiene en ese momento y ponerles un nombre claro: demasiada seguridad, desdén, temor… Posteriormente analizar de dónde procede este sentimiento: de su carácter; de experiencias históricas, recientes, de un tercero… de esta manera se logrará crear distancia y ser consciente de cómo se está pensando. Se habrá objetivado el pensamiento.

De esta manera, uno podrá visualizar el éxito y ver si realmente vale la pena. Habrá vendido la empresa y se dedicará a otra actividad con el dinero generado, habrá comprado la actividad que le permitirá entrar en un nuevo canal de distribución con un riesgo financiero asumible o no…

Finalmente, uno se conoce bien a sí mismo y sabe cómo es: optimista, pesimista, precipitado, lento… conoce es realmente su cerebro reptil y verá si esa visión anterior es cierta o equivocada.

Seguramente, algunos lectores creerán que este enfoque es teórico y otros que es una buena recomendación… aquí ya funciona el cerebro no consciente… el reptil.

Así nuestras estadísticas manifiestan que, de las operaciones consumadas, los intervinientes consideran que más del 50% de operaciones no funcionan y, también según nuestras estadísticas, de las no efectuadas, más del 50% debieron de haberse efectuado.

 

Josep Ma Romances, Fundador y Presidente CLOSA Capital